domingo, 20 de diciembre de 2009

Zitlalin in memoriam

No quiero que estés triste.

Moztla, keman newatl nionmikiz
amo kaman ximokwezo.
Nikan, okzepa nikan nionwalaz
kwaltzin witzitzilin nimokwepaz.

Zoatzin, keman tikonitaz tonatiw,
ika moyolo xionpaki.
Ompa, Ompa niyetoz wan totahtzin
kwaltzin tlawilli nimitzmakaz.


Mañana, mañana que yo muera,
no quiero que estés triste.
Aquí, aquí yo volveré
convertido en colibrí.

Mujer, cuando mires hacia el sol
sonríe con alegría.
Allí, allí estaré con nuestro padre,
y te enviaré hermosa luz.


Acaso engañados vivimos de una luz por nos tan solo recreada...

Un verdor tenue suspirado.

Es difícil dejarse llevar por el viento, sin que resistas, de algún modo, la onda llaga que aún persiste. Un espejismo que nos llevaba a cualquier parte que queríamos. Nada más extraño que lo real. La cuadrada etiqueta que mancha la naturaleza de lo existente en el mundo.

Me pienso interminable en lo complicado de mi historia, pero siempre olvido que no soy más que el tiempo. Quizás la luz de mañana animará mis pasos. Y yo estaré confundido como ayer... Sabiendo ahora que descubrí dulce armonía, no será así cuando despierte.

Agosto 2008

No hay comentarios: